El verano es sinónimo de época de disfrute y desconexión. Es tiempo de actividades al aire libre y pasar largas horas expuestos al sol, pero no debes olvidar el cuidado de tu piel, ella te lo agradecerá.
Los cambios de horarios y actividades pueden provocar que modifiquemos nuestra rutina de cuidado diario. Si quieres mantener tu piel sana, sigue leyendo este post donde podrás descubrir como mantener tu rutina de cuidado durante el verano. Te damos cuatro consejos útiles que te enseñarán a mantener la actividad normal de tu piel:
Exposición al sol. Se recomienda un factor de protección solar alto para defender nuestra piel de los rayos ultravioleta. Este debe ser elegido de acuerdo con el tipo de piel. Además, deben aplicarse 30 a 45 minutos antes de iniciarse la exposición al sol, ya que son eliminados por el sudor y el agua. Conviene reducir al mínimo la exposición al sol en las horas centrales del día.
Hidratación. La hidratación debe ser en las dos direcciones, de dentro hacia fuera mediante la ingestión de líquidos especialmente agua y de fuera hacia dentro, con el uso frecuenta de cremas antes, durante y después de la exposición al sol.
Alimentación. No debemos olvidar la importancia de mantener una alimentación saludable, completa y variada. Debe priorizarse el consumo de frutas y verduras, alimentos ricos en vitaminas antioxidantes tan necesarias para nuestro cuerpo.
Vestimenta. Cuidar la piel de todo el cuerpo implica evitar el uso de ropa o zapatos hechos con materiales que impidas la respiración de ella; por ello aconsejamos el uso, preferentemente, de prendas transpirables y de algodón.
¡ Y ahora a disfrutar del verano!