Ser madre y deportista de élite es difícil pero posible.“No concibo mi vida sin estar subida a una tabla” desvela. Así nos lo ha demostrado durante esta cuarentena mientras entrenaba en la piscina de su casa. Campeona del mundo de windsurf y madre, así es Blanca Manchón.
Hoy va por todas las deportistas que como Blanca, dedican esfuerzo y mucho trabajo para mantener su marca e incluso mejorarla, prueba perfecta para decir que la maternidad es compatible con el deporte, su pasión.
En la actualidad, ser mujer trabajadora, empresaria y tener el título de madre es aún un reto para la sociedad y para las propias protagonistas. En pleno siglo XXI, la igualdad entre géneros sigue sin percibirse en muchos sitios, y si le sumas ser mujer trabajadora además de madre supone pasar ciertas épocas “complicadas” en tu carrera profesional.
Desde pequeños nos enseñan a luchar por nuestros sueños e ir a por ellos, cueste lo que cueste y así sucedió, seis campeonatos del mundo de Windsurf a sus espaldas y nombrada como la “Mejor Regatista mundial del año 2010″, algo que en España solo había logrado Theresa Zabell. Esa misma que perdió todos los patrocinadores en 2007 tras anunciar su embarazo. Pero su pasión y ganas no le hicieron desistir, sino continuar, acompañada siempre por su familia, sus mejores fans que la apoyan incondicionalmente entrenamiento tras entrenamiento.
Pero su historia empieza con un legado familiar en el 2003, una pasión que comparte con su padre y hermano, que hasta el día continúan, largas horas de coche para aprovechar el mar, reuniones familiares alrededor del windsurf…
Tras nacer su hijo Noa, ha cambiado su visión, ahora entrena y compite de una forma diferente, un rendimiento que se ha visto en alza aprovechando cada minuto de su entrenamiento, peleando como una guerrera por lo mejor para su país. Un plus de madurez que dicen que se adquiere por las hormonas. Actualmente no se plantea la retirada, siempre habrá tiempo para rendirse, y serán otros los factores que le hagan retirarse de las competiciones.
Nosotros apoyamos a Blanca incondicionalmente y como ella hay millones de deportistas españolas, Natalia Rodriguez o Nuria Fernández, que tuvieron y tienen miedo y respeto al embarazo. Ahora ¡llena de energía!, inmersa en nuevos proyectos que han traído la nueva normalidad.