Procedente del extracto de las semillas de árbol que le da nombre (de la región suroeste de Marruecos) lugar donde el comercio de esta especie es una actividad importante. Su limitada localización hace de él un fruto bastante raro. Sus usos son múltiples, desde rutinas de belleza, hasta fines medicinales. De hecho, sus beneficios se han hecho tan populares que la industria cosmética lo está incluyendo como ingrediente en sus productos.
El aceite de Argán, también conocido como oro del desierto, es un producto cosmético y comestible que se obtiene tras un proceso de secado de los frutos del árbol de Argán expuestos al sol. Una vez secos, se extrae la semilla de la almendra manualmente y pasa a prensarse en frío. Debido a que la extracción es en frío, sin torrefactar las semillas, este aceite es dorado claro y su olor apenas es apreciable.
Sus ingredientes, rico en vitamina E, vitamina A y con una gran cantidad de antioxidantes, lo hacen especialmente beneficioso para el cabello y la piel, ya que tiene propiedades hidratantes ¡Todo esto en una botella! A continuación te presentamos los principales usos y beneficios, no dejes de descubrirlos:
Las personas con piel seca se benefician de esta semilla. Los ácidos grasos y la vitamina E que contiene reparan la piel dañada y la nutren, ayudando a hidratar la piel.
Anima el cuidado de las manos secas y la piel áspera ¡nutre, hidrata y suaviza! De esta forma la piel de las manos y de los pies estará más flexible y las uñas más fuertes.
El aceite de argán es también maravilloso para los labios. No sólo ayuda a mejorar los labios agrietados, sino también a mantenerlos suaves, flexibles y cuidado.
Podemos apoyarnos en él, para mantener hidratada y suave la piel. Debido a la gran cantidad y diversidad de ácidos grasos y vitamina E, este aceite es perfecto para cuidar la piel de forma natural. ¡También se puede utilizar para el rostro!
Sus propiedades nutritivas, hacen que se pueda utilizar para facilitar el peinado. De esta forma tu cabello ¡estará más sano por dentro y por fuera!
¿Aún no lo has incluido en tu rutina de belleza? ¡A qué esperas!